domingo, junio 23, 2013

Lone Survivor

Sí, lo reconozco. Últimamente no juego más que juegos indie. Pero es que los desarrolladores indie ahora mismo hacen juegos mejores y más baratos donde lo que prima es la experiencia y no ver cómo se mueve el pelo de la protagonista del juego (aunque no dudo de que sea también un buen juego). Así que nos ponemos las gafas de pasta para hablar de otro indie. Venido del mundo del survival horror, demos la bienvenida a Lone Survivor.

En ocasiones veo muertos...

Lone survivor cuenta la historia de supervivencia de un joven después de que una misteriosa enfermedad haya convertido a la mayor parte de la población en monstruos, o lo que el común de los mortales llamamos zombies pero que aquí es un término que se evita porque los zombies empiezan a cansar. El caso es que en el momento en el que tomamos control de nuestro protagonista, identificado por su perenne máscara quirúrgica y su traje, este lleva un tiempo indefinido encerrado en su habitación y es hora de sobrevivir.

El juego se muestra en 2D con pixel art. Porque los programadores de videojuegos no tienen ninguna habilidad para los gráficos y hacerlos así es más adecuado y canta menos. Como todo buen juego de horror, el protagonista posee una pistola, con balas limitadas claro, y una linterna para iluminar los entornos más oscuros. Sí, este es un juego de esos que cree que con poner las cosas a oscuras y limitar la batería de la linterna ya consigue infundir terror. A ver si se dejan de chorradas porque al final lo único con esto es que te pases gran parte del juego totalmente a oscuras recorriendo pasillos hasta que necesitas la linterna para algo. 

El protagonista. Sí, no se ve una mierda. Esto es con la linterna encendida. FUN.

El caso es que lo primero que hay que conseguir además de balas y pilas, es comida. Nuestro protagonista va desfalleciendo de vez en cuando y necesita comer y dormir de vez en cuando. Dormir sirve para salvar la partida y sólo se puede hacer en la cama del apartamento, lo que obliga a volver allí de vez en cuando. Además, aunque el juego permite comer cosas crudas, los resultados son mejores si se cocinan los alimentos, cosa que también se puede hacer sólo en el apartamento. Por fortuna, para paliar un poco tener que hacer el camino de vuelta a casa cada vez, a lo largo del juego se van encontrando una serie de espejos en diversas localizaciones que permiten viajar entre el espejo de nuestro apartamento y el punto más avanzado que hayamos encontrado.

Durante nuestra exploración del bloque de apartamentos en el que vive el protagonista y de la ciudad a su alrededor iremos encontrando infectados. La opción fácil es la de ir matándolos ya que no resucitan. Más, quiero decir. Pero no sólo tenemos la opción de matar a los zombies que encontremos. También se pueden evitar mediante el sigilo. El juego introduce una mecánica en la que el protagonista se puede mover en dos niveles diferentes. En los escenarios encontraremos nichos en la pared en los que el personaje puede introducirse y avanzar por las sombra esquivando a los zombies. También se pueden utilizar diversos objetos para distraerlos, como carne cruda y bengalas. 

Lone survivor. El juego que no hace honor a su nombre...

Lo mejor del juego es sin duda la historia. Y tengo que decir que no está mal. No es nada sorprendente, aunque la forma de ir contándola a base de sueños y pequeños descubrimientos está bien gestionada. Los gráficos cumplen bastante bien su función, diferenciando claramente los escenarios y dándole un toque siniestro a todo. La parte que más flojea es la de los zombies y la luz sin embargo. 

Con tanto ir y venir por las mismas zonas, si te has dejado zombies sin matar en algún sitio tienes que volver a esquivarlos una y otra vez. Por la misma razón, porque ya te conoces las zonas, pues vas a oscuras para ahorrar baterías. Al final te pasas la mayor parte del juego sin ver nada. La forma que tiene el protagonista de disparar es bastante frustrante a veces también. Especialmente cuando se te obliga a luchar en vez de esquivar. Lo cual es mucho peor cuando consideras que de los varios finales que tiene el juego, el bueno se logra sin matar a ningún zombie. Creo que prefiero arrancarme las uñas rascando hielo, porque hay zonas con muchos muchos enemigos que tienes que atravesar varias veces.

Y así es como la humanidad se fue al garate. El último superviviente encontró una máquina recreativa y murió buscando monedas para poder seguir jugando...

En definitiva, creo que el juego es pasable. No está mal, pero creo que ha habido juegos este año, o más bien el año pasado, mucho mejores. No soy muy fan de este tipo de juegos, me cansé después del Resident Evil 2, pero para los fans de este género encontraran exactamente lo que buscan, aunque con algo más de profundidad en la historia que lo que es costumbre. Eso sí, el ambiente no llega ni de broma a las cotas de Amnesia o los mismos Resident Evil.

TLDR: Meh. Está bien. Es barato y dura sólo unas pocas horas. Tampoco hay que esperar una maravilla.

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