jueves, marzo 10, 2011

¡Feliz 20 cumpleaños Blizzard!

Bueno, bueno, mira quién casi podría beber en este país... Esta semana se cumplen 20 años de la creación de una de las compañías de chupasangres videojuegos más exitosa: Blizzard Entertainment. Son tantos y tantos juegos suyos que me han tenido horas y horas entretenido que parece al menos justo hacer una recapitulación (sí, este es OTRO de esos posts). Por supuesto, también podéis pasar de mi culo y ver este vídeo que los chicos han grabado y que seguramente sea más interesante (y los comentarios del tipo "cogimos un C++ for Dummies y nos pusimos a aprender y programar juegos" hacen que me replantee mi vida).

¡Devolvedme mi vida! ¡O al menos dadme acceso a la alpha de Titan!

Los comienzos de Blizzard fueron muy humildes. Al principio la compañía se dedicó a realizar ports de juegos a diversas plataformas, lo que según ellos les sirvió de mucha ayuda al poder ver el código de los juegos (y así aprender un poco a hacerlos). De esta época viene el primer juego relacionado con Blizzard que he jugado: el magnífico Battlechess. Lamentablemente la versión que jugué era la de Amiga y ellos hicieron el port de Commodore, pero no deja de ser un grandísimo juego cuyas dos únicas pegas son que: a) se trata de adjedrez y b) muy a menudo sucedía que te dejabas comer una pieza sólo para ver la animación.

Literalmente, la muerte del caballero negro (Monty Python dixit)

Realizar estos ports les sirvió para ganar experiencia (¡ding!) y fondos para poder realizar sus propios juegos. En un mismo año sacaron dos juegos originales que ganaron sendos premios al mejor juego de algo del año. El primero de ellos es un juego de carreras de SuperNintendo llamado Rock'n'Roll Racing. Destaca por ser el primer juego de carreras al que le pusieron una música molona de fondo (la lista de canciones es impresionante desde luego, con cosas como esta, esta, esta y esta). Yo lo he probado y... no me gustó nada. De hecho ni siquiera me acuerdo bien de por qué, simplemente dejé de jugar a los 5 minutos. El otro juego es uno que cualquier amante de los puzzles debería jugar: Lost Vikings. La historia de 3 vikingos secuestrados por un alienígena que deben superar obstaculos de camino a su casa. Con el vikingo gordo del escudo, el de la espada y el de los cuernos que corría, este juego resulta de los más divertidos y entretenidos que puedes jugar.

Erm...¿chicos? ¿Cómo que es que a vosotros os han dado espadas y escudos?

Hasta después de publicar esos dos juegos, la compañia era conocía como Silicon & Synapse. A partir de entonces fue cuando cambiaron a su actual y más conocido nombre. El primer juego publicado bajo el sello de Blizzard fue Blackthorne. ¡Legen... wait for it... dary! ¿Qué puedo decir de este juego? En una frase: Prince of Persia meets a shotgun. No recuerdo si tenía argumento, y si lo tenía no era importante, pero jugar con un rockero que va con su escopeta matando alienígenas en niveles muy similares a los de Prince of Persia es divertidísimo. A diferencia del Lost Vikings, este no me lo llegué a pasar, que era dificillo.

Porque descolgarse de los salientes nunca ha sido tan satisfactorio como cuando dejas caer una granada.

Aquí ya empezaron a centrarse en las tres sagas que les han hecho de oro, empezando con el abuelo Warcraft: Orcs & Humans. Un juego que revolucionó el genero de los RTS con mejoras importantes en diseño de misiones e interfaz de usuario y que consiguió que empezase a despegar la idea del multijugador (que ya existía, pero que era más o menos ignorada por la mayoría de la gente). Este fue el juego que me hizo dedicar unos cuantos años a RTSs así que poco puedo decir más que: mogollón de arqueros//arponeros y un caballero//ogro para pullear hacen que te pases el juego (o así me lo pasé yo, vaya).

Cuantos buenos recuerdos y lo mucho que intentaría arrancarme los ojos si lo jugase ahora...

Warcraft II no se hizo esperar mucho. Lamentablemente, y aunque es un juego muy bueno, jamás cesaré de decirle a Blizzard dónde se puede meter el aceite, los barcos y la madre que los parió. Si ignorabas el mar el juego estaba la idem de bien (see what I did there!!!). A pesar de perder aceite, el juego consiguió aún más fama que su predecesor e incluso hoy sigue generando dinero.

Con ganas de dejarme sin dinero, publicaron un pequeño RPG que revolucionó el género, al sustituir los aspectos más tácticos de los anteriores rpgs por dosis de acción. Un festival de clicks de ratón. Obviamente estoy hablando de Diablo. Además, este fue el primer juego que soportaba Battle.net, por lo que el multijugador se convirtió en la norma más que en la rareza. Eso sí, jugar en Battle.net era ver como un montón de gente que usaba trainers para modificar sus personajes te barría. Por mi parte, nunca llegué a pasarmelo ya que por aquel entonces todavía pensaba que subir por igual todos los atributos y dedicarse a aprender hechizos siendo guerrero era la forma kewl de jugar (y durante años mis personajes siempre tendieron al equilibrio... luego llegué a D&D 3a y amigos maxis-que-te-cagas (TM) que me abrieron los ojos a la especialización). ¡¡Pero al menos llegué al infierno!!

Y dices que tu personaje es totalmente legal siendo nivel 99 cuando el límite está en 40, ¿no?

Y a partir de aquí vinieron mogollón de años en los que esta compañía no sólo me ha sacado los cuartos sino que además me ha robado años de vida. Paso de comentar nada de Starcraft. Si alguien no conoce el que posiblemente sea el mejor RTS de la historia está perdiendo el tiempo en este blog. Con mi modem de 14kbps me pasaba mi 1h diaria de internet (infovía ftw!!) jugando y el resto jugando contra la máquina. Participé en torneos, en la liga europera (llegando a B6-7 si no recuerdo mal) y jugando durante años hasta que en mis exámenes empezaba a utilizar las hojas en sucio para escribir build orders. La primera nochevieja que salí por ahí con amigos, la pasamos en un ciber jugando a este juego. Ningún maestro del mal podría haber inventado algo que te sorbiera la vida tanto como este juego... Salvo que esa mente criminal trabajase en el lanzamiento de Diablo 2.

No ayudó darse cuenta de que nunca llegaría a estar ni cerca del nivel de estos enfermos excelentes jugadores

Otro juego al que le he echado más horas que un tonto. Jabazonas, hammerdines, hechiceras, barbaros, nigromantes, asesinas de trampas, inútiles druidas... Los objetos, SoJs, Grandfathers, las Titan's, las runas... Todo en el juego está diseñado para tenerte horas y horas en una táctica al que le pondría nombre un juego que salió meses antes: hazte con todos. Y además mi camello particular aprendió una valiosa lección jugando conmigo a este juego: es peligroso dejar a Deimar que vaya posteando por foros ajenos en nombre del clan (del SC sacó la absurda idea de que prefería no jugar conmigo ni contra mí, especialmente esto último).

Entonces llegó Warcraft III, y al principio fue bueno. Pero rápidamente me cansé al comprobar que el juego se basaba básicamente en coger a tu heroe y grindear niveles hasta que él solito se pudiese cargar al enemigo. El juego evolucionó a partir de eso y mejoró, pero para mí ya había pasado una época y aunque en ocasiones llegué a estar en puestos altos del ladder, claramente no era el Starcraft (y los héroes apestan, nerf said!!). 

World of Warcraft... Hola, me llamo Deimar, y soy un adicto. Hace... erm... 30m que no juego al WoW (o sea, lo que estoy tardando en escribir esto). El rey de los MMO, nada más que decir salvo que hay que jugarlo con amigos o si no pierde bastante (al menos después de más de 5 años jugando).

Mi último personaje, atravesando por ese momento de su vida en el que decidió enseñar a bucear a un grupo de crías de wyvern.

El último de la remesa, Starcraft II pues... es un bonito lavado de cara a Starcraft. Como acabé harto del mismo, pues ni siquiera he llegado a echar demasiadas partidas en multijugador, pero puedo decir que el single player merece la pena (aunque me timaran con el precio y no hubiera rastro de campaña zerg o protoss... NERD RAGE!!!!!) (no, pero en serio, a un precio reducido la campaña merece la pena).

Y hasta aquí mi pequeña retrospectiva. El año que viene vendrán joyas como Diablo III o la segunda campaña de Starcraft II (still no zergs... sigh) o el proyecto mata-WoWs de Blizzard llamado Titan (jode, hasta ellos se apuntan al carro de ver quién mata al WoW). Yo seguiré aquí (en un sentido metafórico de la palabra, no literalmente aquí en este pueblucho linda aldea inglesa) "preordereando" sus juegos hasta que pueda pagarle la paga en oro del WoW a los nietos sobrinos hijos de los amigos (suponiendo que existan, que lo mismo es mucho suponer... como los cónyuges de los amigos).

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